Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido

Paraíso de amantes de la naturaleza y excursionistas, múltiples rutas nos permiten conocer sus bellos rincones.
El día 16 de agosto de 1918, mediante un Real Decreto firmado por S. M. el rey Don Alfonso XIII en el Palacio de la Magdalena (Santander), se declaró el Parque Nacional del Valle de Ordesa, con el establecimiento también de sus límites geográficos que en ese momento sólo abarcaban 2200 hectáreas. En 1982 tras la reclasificación y ampliación por la Ley 52/1982, de 13 de julio, el Parque Nacional adquiere su dimensión actual con un total de 15.608 hectáreas y 19.679 hectáreas de la Zona Periférica de Protección de los municipios de Bielsa, Broto, Fanlo, Puértolas, Tella-Sin y Torla-Ordesa. En lo que respecta a la Reserva de la Biosfera Ordesa - Viñamala, esta superficie del Parque Nacional, coincide con la llamada Zona núcleo de la misma.

Mapa cedido por La Comarca de Sobrarbe

El interés medioambiental del territorio declarado como Parque Nacional radica en la concentración de las montañas y los valles de Ordesa, Escuaín, Añisclo y Pineta. El Monte Perdido cuyo pico (3.348 m) es la montaña calcárea más alta de Europa. Además de su compleja geología, el Parque Nacional concentra una gran riqueza biológica visible en sus bosques de hayas, abetos, quejigos, pastizales, pinares y bosques mixtos que constituyen el hábitat idóneo para el sarrio, el topillo nival, la marmota o importantes comunidades aves rapaces y rupícolas como el buitre leonado, el halcón peregrino, el treparriscos o el quebrantahuesos.